«Érase que se era, érase que no era». Así comenzaban las historias que el padre de Marjan le contaba cuando era pequeña, fábulas como la de la niña que liberó a un unicornio de la trampa de un cazador o la del niño nómada que rescató a un bebé shirdal. Cuentos de bestias míticas que siempre la lle- naron de curiosidad y asombro.

Pero Marjan ya no es una niña. A raíz de la repentina muerte de su padre, ella intenta seguir adelante con todo: sus estudios, sus amistades y la clínica veterinaria de su padre. De repente, un día, recibe una visita que le revela algo sorprendente: el padre de Marjan no era un veterinario cualquiera. Las criaturas de las historias que le contó eran reales y viajaba por el mundo para cuidarlas. Y ahora que él se ha ido, ella debe ocupar su lugar.