[Podemos buscártelo, pregúntanos precio y tiempo de entrega]

PVP. 12,00€

Avisar si vuelve a estar disponible.


Levanté la lona. En el fondo de mis ojos se proyectó el bulto borroso de un cuerpo de mujer. Retrocedí, pero sin dejar caer la lona. Me pesó la mano que sostenía el mechero. Camisa de fra nela a cuadros verdes y rojos, vaqueros. La coleta desaparecía por su hombro derecho y reaparecía a la altura del codo. Ninguna herida a la vista. Tez de yeso, mate, pero con un pequeño brilló en los ojos no cerrados del todo, en las ranuras aparecía un des­tello diminuto y lejano que sólo podía ser el reflejo de la llama de¡ mechero. La boca entreabierta, los incisivos de un blanco más lim­pio que la piel, pero, lo advertía por primera vez, dos rayitas negras indicaban que no estaban parejos del todo. Tenía los bra­zos abiertos de forma forzada, pegados al cuerpo. Las piernas esta­ban estiradas y juntas, la sombra de una extensa mancha oscura en la entrepierna.


Ficha técnica